No hay duda de que dividir tu atención entre las exigencias de un trabajo a tiempo completo y una educación universitaria no es lo ideal. Pero eso no significa que no pueda hacerse.
La idea de mantener un trabajo a tiempo completo mientras se dedica tanta energía valiosa a la obtención de un título parece desalentadora para muchos. Aunque ciertamente no será fácil de lograr, puede ser una necesidad inevitable para aquellos que esperan avanzar en sus carreras a través de la potenciación de la educación superior.
Sigue los consejos de los muchos profesionales que han dado estos pasos antes que tú mientras te preparas para la transición a la vida de estudiante trabajador, y encontrar el equilibrio adecuado puede ser más fácil de lo que habías previsto.
En su camino hacia la inscripción en un programa de grado, querrá estar seguro de que está seleccionando el programa que mejor se adapte a sus necesidades y a su apretada agenda. Da el primer paso para reducir tus opciones determinando el tipo de programa que estás buscando. Te recomendamos cursar licenciaturas mixtas.
Crea un espacio de trabajo designado para el estudio
Una forma de asegurarse de seguir siendo productivo durante los estudios es crear un espacio en casa que ayude a fomentar un aprendizaje óptimo.
“Los espacios de aprendizaje deben estar limpios y organizados, y lo ideal es que estén decorados con colores cálidos de pintura y zonas de asiento cómodas”, explica Elizabeth Malson, presidenta del Instituto Amslee. “Un escritorio (o una mesa de cocina) y una silla son imprescindibles para una posición corporal saludable a la hora de escribir y trabajar con el ordenador”.
Malson también sugiere que incorporar elementos como un tablón de anuncios que puedas poblar con plazos importantes, fotos inspiradoras o citas alentadoras puede ayudar a crear un entorno consciente que se adapte a tus objetivos y motivadores personales.
Priorizar la organización
Cuando se llevan muchos sombreros diferentes, puede ser fácil perder la pista de algunas de las piezas en movimiento de las diversas responsabilidades que hay que hacer malabares. Aquí es donde la organización puede desempeñar un papel crucial, sugiere Candess Zona-Mendola, editora de MakeFoodSafe.com. “Tienes que saber dónde está todo”, dice. “Guarda las cosas donde deben estar. Carga el portátil y el móvil todas las noches. Mantén tus provisiones bien abastecidas, para que no tengas que dejar lo que estás haciendo para [reponer]”.
Si no has utilizado anteriormente planificadores, ahora puede ser el momento de comprar uno. “Las agendas son muy útiles, pero no se utilizan lo suficiente, sobre todo para alguien que trabaja y estudia a tiempo completo”, afirma Amanda Raimondi, experta en estilo de vida y escritora de Grapevine. “La mayoría de los planificadores dividen el día por horas, lo que hace que sea muy fácil sacar tiempo para los deberes y el estudio”.
Hazte dueño de tu tiempo
El tiempo nunca es más valioso que cuando estás equilibrando las responsabilidades de trabajar a tiempo completo y obtener un título. “Cuando eliges volver a la universidad y tener una carrera, has elegido ‘el camino de mayor resistencia’, y tu tiempo es muy valioso”, explica Scott Vail, propietario de C4 Communications.
Para tener éxito en circunstancias tan estresantes como éstas, insta a los estudiantes a que sean conscientes de cómo emplean su tiempo. “Si quieres tener éxito a largo plazo, debes programar todo: el tiempo de clase, el tiempo de estudio y el tiempo de ocio”, añade Vail.
Incluso si procrastinar ha sido tu tendencia en el pasado, Zona-Mendola aconseja evitarlo a toda costa si también estás equilibrando el trabajo a tiempo completo. “Haz las cosas de inmediato. ¿Tienes todo un semestre para escribir un trabajo? Empieza a escribirlo en cuanto sepas lo suficiente sobre el tema, ya sea la primera semana o a mitad de camino. Entrégalo enseguida. El profesor se alegrará de ello”, dice.
Aprovecha tus tendencias naturales
Malson cree que uno de los mayores servicios que un estudiante puede hacer por sí mismo es conocer realmente sus hábitos como aprendiz y aprender a utilizarlos en su beneficio mientras trabaja para obtener un título.
“Si eres un planificador, asegúrate de asignar bloques para completar el trabajo del programa durante el momento del día que se ajuste a tu horario”, ofrece como ejemplo. “Si eres un búho nocturno o una persona matutina, planifica para usar esto a tu favor, sabiendo a qué horas estás más alerta”. Planear estudiar de nueve a once de la noche después de un largo día de trabajo puede funcionar para algunos, detalla Malson, pero no será productivo para otros.
Cuídate
Zona-Mendola trabajaba como asistente legal a tiempo completo mientras cursaba su licenciatura y su título de asistente legal simultáneamente, y le costó mucho priorizar el cuidado personal cuando estaba en medio de todo. “Pasaba muchas noches sin dormir y vivía a base de bebidas energéticas. También me olvidaba de comer”, recuerda. “No seas como yo. Me desgasté y enfermé a menudo”.
Algo tan sencillo como dormir bien puede marcar la diferencia en medio de tu ajetreo de responsabilidades diarias. “Aunque tengas un millón de cosas que hacer, necesitas dormir”, insta Raimondi. “Cuando el cuerpo duerme, se repara y se prepara para el día siguiente. La falta de sueño dificulta la concentración y la productividad”. También recomienda programar aunque sea una hora al día para desestresarse leyendo un libro o viendo un episodio de uno de tus programas favoritos de Netflix.
“Puedes pensar que es una pérdida de tiempo, pero tener un descanso de vez en cuando realmente te hará más eficiente en tus tareas diarias”.
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